“Donde la nada se da cita con el tiempo y se es divino en la cáscara rota… más allá de otros destinos, sin estopas ni excusas, en la pesadilla de los dioses, en el hueso seco de una sonrisa… aplastado por las miserias, eterno, sin golondrina… Se enciende el abismo en una piedra,
en el ángulo cambiado, no es una ciudad cualquiera, quizá sea la esperanza en hoja de otoño…”.
En Buenos Aires, ciudad en la que nací a poco que llegara el hombre a
la luna. Estudié música a la misma edad que jugaba con autitos y soñaba
con volar, con muy buenos maestros, gracias al apoyo de mis padres. Y,
como de jugar se trataba resultó ser unos de los juegos más serios de mi
vida. Pasión que funda mi vocación tanto en la docencia como en mi
carrera artística musical. No sé de qué me recibí, pero recibí, de eso
no tengo dudas y parece que me enseñaron bien, porque nada me resigna a
devolver un poco de todo lo que, sin prejuicio de generosidad, me han
sabido dar. Un día intenté copiar mariposas, e imitando a mi viejo —él
si que dibujaba bien—, aprendí el otro lado de las cosas. Tanta fue mi
inquietud por las cosas maravillosas fundadas en la belleza que no sería
casual que me explotaban los sentidos tanto las mamushkas como el mundo
del principito del francés aquel, haciendo de la escuela otro refugio
de amistad y aventura. Desde esas mismas paredes blancas brotaron de un
libro los versos de un poema de Juana de Ibarbourou y ya nada fue igual.
Luego vino Oscar Wilde con sus gigantes y golondrinas celestes, Edgar
Alan Poe y el misterio y los gatos nocturnos, Julia Prilutzky Farny con
su amor a flor de piel, Pablo Neruda y sus bestias, Antonio Machado con
la flor en el ojal. Y cuanto más leía más mundo encontraba en la edad de
remontar barriletes. Luego ensayé mis primeros cuentos, mis primerizos
versos, quizás para conquistar a una niña o para conmover al abuelo que
no sabía leer letra escrita, pero si el alma. Luego vino Julio Verne,
Cervantes, Hernández, así, todo mezclado, con la guitarra de Eduardo
Falú y la poesía de Jobim. El jazz más oscuro y negro conviviendo con
las mejores arias italianas, coros, los grupos vocales de aquí y allá.
El rock sinfónico, la paleta de Velásquez, Picasso, Dalí. Y el alma
blanca del flaco Spinetta quién dijo con emociones cual era el camino
posible. Y un mundo de poesía y nuestro rock nacional y los grandes
compositores de tango, orquestas, folklore. Todo es mi maestro, ayer y
hoy y así seguirá siendo.
En el camino estudié en el
conservatorio de música Julián Aguirre. Al viajar a capital federal
tuve la fortuna de encontrarme con músicos increíbles que me acercaron a
lo mejor de la avanzada del folklore argentino el cual abrazo desde
hace más de 20 años. Canté en coros de grandes maestros como Ángel
Concilio y Damián Sánchez, con el que grabamos, con el coro de SADAIC,
un disco en 1999. Trabajé en la escuela de música del maestro y pianista
Ruben Ferrero e integramos proyectos musicales con el cual grabamos
varios materiales discográficos e hicimos una gira a Italia, pero por
sobre todo la vida me regaló su amistad, tan generosa y grande. Así
también con la gran música y profesora de charango Adriana Lubiz, con la
cual grabamos dos discos, con el dúo Ensamble 2, en 2000 y 2005. Grabé
dos discos solistas en 2006, uno en Medellín, Colombia. Dirijo el grupo
vocal La Propaladora desde hace 3 años y lo integro desde hace 11, con
el cual grabamos un disco en 2008. El ángel Homero Manzi con su poesía
redonda e infinita me llenó el alma de conquistado lenguaje. Luego lo
hizo Manuel J. Castilla junto al picor endiablado de Gustavo Leguizamón
en las melodías. ¿Quién se puede resistir así en un país colmado de
duendes? No es casual, entonces, que mi primera insolencia literaria
llevase el nombre de Cuentos líquidos, humoradas de carnaval, libro
editado en la editorial de los cuatro vientos en 2006. Contienen diez
cuentos-grajeas fantásticos sin anestesia. Y en 2007 me publica
Toscolitio, el bulemún, Imaginante editorial, mi primera obra netamente
surrealista en formato de cuentos muy breves y poesías. Amo al
surrealismo en todas sus formas desde Cesar Vallejo hasta Oliverio
Girondo, de Macedonio Fernández hasta Vicente Aleixandre, Alejandra
Pizarnik, Juan Gelman. Tengo tres obras inéditas pronto a publicarse, la
primera se trata de Argentania, Paraíso de mujeres, una novela de
ciencia ficción. Al fin, el mundo es gobernado por mujeres.
Le sigue Toscolitio, juguetes de agua. La segunda parte de una saga de
cinco volúmenes, con orientación a niños de hasta 12 años. Juguetes que
se escurren en las manos. Y por último La insurrección de las gorgonas.
Nouvelle que recorre un mundo paralelo o no tan lejano.
Cuando los señores Julio Cortazar y Mario Benedetti lograron arranarme
oleadas de lágrimas comprendí que era un legado rico para imitar y en
eso andamos, agradecidos por tanto amor.
Mi
actualidad consiste en viajes no tan imaginarios con trenes fantásticos
que recorren unas calles de pan y tinta, invitándome a diario a remontar
barriletes empecinados en ganar el cielo a otros mundos menos
económicos de poesía, de lírica y de canto.
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In Buenos Aires, the city where I was born a little man arrived at the moon. Studied
music at the same age playing with toy cars and dreamed of flying, with
very good teachers, with the support of my parents. And, as it was found to be playing some of the more serious games of my life. Passion that my vocation founded both in teaching and in my musical career. Do
not know what I got, but I received, I have no doubt that I was taught
and it looks good, because nothing I resigned to return a little of
everything, without prejudice of generosity, I have been able to give. One day I tried to copy butterflies, and imitating my old man if he drew it right, I learned the other side of things. Such
was my concern about the wonderful things based on the beauty that I
would not be exploited casual way as both Mamushkas world that French
prince, making the school other refuge of friendship and adventure. From those same white walls sprang from a book the verses of a poem by Joan of Ibarbourou and nothing was the same. Then
came Oscar Wilde with his celestial giant swallows, Edgar Alan Poe and
the mystery and nocturnal cats, Julia Prilutzky Farny your skin deep
love, Pablo Neruda and his beasts, Antonio Machado with boutonniere. And the more I read more of the world was at the age of fly kites. Then
I tried my first stories, my first-verses, perhaps to conquer or to
touch a girl's grandfather could not read written word, but if the soul.
Then came Jules Verne, Cervantes, Hernandez, and, mixed with the guitar of Eduardo Falu and poetry of Jobim. The darker and black jazz coexisting with the best Italian arias, choruses, vocal groups here and there. The rock symphonic palette Velasquez, Picasso, Dali. And the skinny white soul with emotions Spinetta who said that was the way possible. And a world of poetry and our national rock and great tango composers, orchestras, folklore. Everything is my teacher, yesterday and today and will remain so.
Along the way I studied at the Music Conservatory Julian Aguirre. When
traveling to Buenos Aires I was fortunate to meet amazing musicians I
approached the best of advanced embrace Argentine folklore which for
over 20 years. I
sang in choirs of great masters such as Angel Sanchez and Damian
Council, with which we recorded with the choir SADAIC, an album in 1999.
I
worked in the music school teacher and pianist Ruben Ferrero and
integrate musical projects with which we recorded several record
materials and made a tour to Italy, but above all life gave me his
friendship, generous and large. So
too with great music and teacher Adriana Lubiz charango, with which we
recorded two discs, with the duo Ensemble 2, in 2000 and 2005. I recorded two solo albums in 2006, one in Medellin, Colombia. I run the vocal group The Propaladora for 3 years and integrated it for 11, with which recorded an album in 2008. The angel Homero Manzi with infinite round his poetry filled my soul conquered language. Then he did Manuel J. Castilla next to Gustavo itching Leguizamón devilish melodies. Who can resist a country so full of elves? It
is no coincidence, then, that my first literary insolence take the name
of Tales liquid humours carnival, book published in the editorial of
the rooftops in 2006. Lozenges contain ten stories, fantastic without anesthesia. And
in 2007 I published Toscolitio, the bulemún, imaginative editorial, my
first purely Surrealist work in very short format stories and poems. I
love surrealism in all its forms from Cesar Vallejo until Oliver
Girondo Macedonio Fernández to Vicente Aleixandre Pizarnik, Juan Gelman.
I have three new works soon to be published, this is the first Argentania, Paradise of women, a science fiction novel. At last, the world is ruled by women. He continues Toscolitio, water toys. The second part of a series of five volumes, with guidance for children under 12. Toys that slip in hand. And finally The insurrection of the Gorgons. Nouvelle walking a parallel world or not so far. When
Messrs. Julio Cortazar and Mario Benedetti managed arranarme waves of
tears I realized it was a rich legacy to imitate and that we walk,
grateful for so much love. My
present is not so imaginary trips with trains that run a fantastic
bread and ink streets, inviting me to fly kites daily gain heaven bent
on other economic worlds less poetry, and song lyrics.
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